No hay nada que una cerveza no pueda arreglar

Pues como os conté ayer un amigo y yo nos cabreamos. Y os quiero contar que todo se ha arreglado.

Pues bien ayer por la tarde nos encontramos de manera fortuita al doblar una esquina, yo iba pensado en mis cosas sin mirar hacia delante y al doblar la esquina por poco no nos chocamos, reconozco que fue muy gracioso, aunque el encuentro fue un poco tenso. Nos saludamos y hablamos un poco, pero como íbamos con prisa no nos entretuvimos mucho.

Esta mañana, me ha mandado un mensaje y le he dicho que no podía hablar ya que estaba en la biblioteca haciendo un trabajo. Pero justamente cuando salía de la biblioteca nos hemos vuelto a encontrar, y esta vez si nos hemos ido a tomar algo.

Tras unas cervezas y una buena conversación, todo a quedado arreglado, incluso nos hemos tomado la última en mi casa.