Turno para León

¡Buenas noches familia! Pensad en soportar medio agosto en Murcia. Ese calor bieeeen rico húmedo, que hace que no puedas estar a las 4 de la tarde en otro sitio que no sea al lado de tu mejor amigo: el ventilador. Por ello mismo nos fuimos pa' León el parejo y yo. En verdad no, porque gracias a Dios mi pueblo está en una montañita y se está de fruta madre a pesar de ser Murcia.
(Por cierto, se me olvidó deciros que el parejo vino a Murcia, pero se acopló más tarde. Se quedó unos 5 días o por ahí, nos subimos los dos para Madrid y al día siguiente partimos para Astorga).

Aclaraciones hechas, comencemos con la aventura leonesa.

El pueblo del parejo, no es pueblo, sino aldea. Pertenece a una serie de pueblos minúsculos que forman Lucillo, que están justo en los Montes de León. Prácticamente saliendo al corral se puede ver el Teleno, el monte más alto, y lo curioso es que durante todo el año, ahí viven unas...3 personas jajaja. Eso sí, tiene todo el encanto de una zona rural. Imaginaos el típico pueblo que está medio abandonado medio no, con las ovejitas por un lado, con cuestas por todos lados, todo hecho de piedra y pizarra, olor a aire limpio y hierba y buenrollismo entre vecinos que da gusto. Más que nada porque medio pueblo es familia jajaja.

Como eran las fiestas de allí, era el momento idóneo para ir. Creo que en mi vida he salido tanto de fiesta, porque cuando no tocaba fiesta en la aldea del parejo, tocaba en la de al lado (que tampoco estaba tan cerca por las malditas curvas), y si no al del otro lado.
Pero mi momento favorito era la vuelta, no porque no me lo pasara bien, aunque hubo algún altercado que otro que ahora os contaré, sino porque se veían las estrellas de una forma...espectacular. Claro, por ahí en un pueblo con 50 casas, la mitad no vive nadie, habrá 5 farolas a lo sumo...y qué maravilla de cielo. Lloré, con eso os lo digo todo, y en mi vida he podido ver tantísimas estrellas fugaces, con las lágrimas de San Lorenzo. Maravilloso.

También te podías encontrar fauna, ¡y la encontramos! Un día vimos un zorrito pequeñito, más mono y pelusón, otro día un corzo (aunque sólo le vi una pata) y el mejor fue el día que nos topamos con una familia de 4 jabalíes cruzando por la carretera. Nunca había visto uno ^.^

De las fiestas no me quejo para nada, me gusta más bailar más que a un tonto un lápiz. He de decir que no se me dan mal la coordinación mente-cuerpo, o cuerpo asecas jajaja pero tampoco es del otro mundo. Pues una noche, nos bajamos a otro pueblo, bastante más grande que el de parejo, y fui a pedirle una canción al Dj, porque estaba harta del trap, a lo que el muy gilipollas me dijo que me ponía la canción si me liaba con él. Os podéis imaginar mi negativa, pero es que insistía y no paraba de insistir, incluso se bajó del "escenario" para dar por saco, y yo buscando al parejo porque ya no sabía cómo reaccionar, estaba asustada, a lo que vino su primo y, como conocía al Dj, se relajó y me dejó en paz. No hizo falta llegar a las manos, al parecer es un tío que siempre va hasta arriba de sustancias, pero bueno, un susto... No me separé del parejo ni para ir al baño, a ver quién se atreve a venir con un armario al lado :3

El caso, deslices a parte, me pasé muchos días ayudando a los suegros con sus huertos, toda una experta estoy hecha con las judías. Pepinos no cogí porque esa jodida planta pincha un huevo xD

Otras tantas tardes me las pasé bailando jotinas, aprendí a tocar las castañuelas y ya parecía más leonesa que murciana (¡sacrilegiooooo!).

Con quien más estuve (además de parejo) fue con este primo y su mujer (los que se casaron en mayo, no mi amiga) nos inflamos a jugar a la pocha, al póker, a los dardos, a dar paseos en busca de animales, incluso un día nos bajamos a un pueblo que se llama la Bañeza, que tocaba Mclan (¿sabíais que la M es de Murcia? jajaja) que es uno de los grupos que más le gusta al parejo, así que fue muy felis.

Como anécdota: un día estábamos jugando a las cartas, a la pocha, y nos llamó la madre del primo del parejo alertándonos de que veía mucho humo, que había fuego, así que salimos parejo, el primo, su mujer embarazada de 6 meses y yo corriendo buscando el fuego/humo/lo que fuera, y terminó siendo un gilipollas quemando rastrojos en su casa y había armado el pifostio de la vida. Todo bien, todo correcto.

Al día siguiente vemos un helicóptero. Y después otro con bolsa. Y otro con bolsa. Y volvían. Un incendio, pero esta vez de verdad, en un pueblo bastante cercano, que empezó en la carretera y casi llega a las casas, pero las autoridades actuaron rápido y lo apagaron pronto.

A los dos días: Cabrera. Qué desastre, qué desgracia más grande, y ni te imaginas lo duro que es hasta que lo vives al lado. Os he dejado al lado un mapita para que veáis a la distancia a la que estaba y cómo se veía del humo. Daba muchísima pena pensar en la cantidad de árboles destruidos, animales muertos, contaminación...todo. Yo desde el pueblo había días en los que no podías salir sin respirar mierda, y por las noches, se veía el resplandor de las llamas.
Cuando ya pasó todo y empezó a estar controlado, te sentabas al aire libre, y veías caer una florecilla silvestre negra, y cenizas por doquier, pero lo importante es que acabó la pesadilla.

Por suerte no me quedo con eso, porque aún faltaban demasiadas cosas buenas. Otro día decidieron llevarme de turismo, así que me llevaron a Ponferrada a ver el castillo de los templarios y varias catedrales, y después nos fuimos a Peñalba de Santiago, uno de los pueblos más bonitos de España (que lo es de verdad eh?) y la disfruté muchísimo, aunque la habría disfrutado mucho más si no me hubiera mareado tanto a la subida por las jod**** curvas -.-". Comimos allí y a la vuelta para el pueblo del parejo pasamos por muchos recintos que albergaban peregrinos (lo mismo estabas por ahí Lucky!) y quisimos ir a bañarnos a un río en un pueblo que se llama Molina Seca...y pa' seco, el río :( Siempre tenía MUCHA agua, pero este año ha llovido poquísimo y estaba medio seco, así que no nos bañamos, pero por la noche nos metimos una barbacoa entre pecho y espalda que hizo que se me olvidara el río.

Los últimos días caía una diluviada, los relámpagos se veían de una manera, que tenía una sensación entre miedo y admiración que te estallaba el corazón de ver lo increíble y precioso que era. Además hacía mucha falta el agua.

Ya los últimos días nos pasamos por un mercadillo medieval en Astorga, donde compré una pulserita a Araceli, que es la que me llevó a Lucena este fin de semana, y me compré unos pendientes súper especiales para mí.
Eran unos pendientes clavados a unos que perdí en Murcia hace, qué se yo, 7 años. Eran...eran, porque ese mismo día rompí uno -.-" Soy así de especial.

DIOS MÍO, casi se me olvida comentaros que probé el cocido maragato, y casi me p*** muero! jajajaja. Es un cocido "normal", solo que se come al revés. Primero se come la carne, que no es solo un poquito de pollo o ternera, sino codillos, costillejas, muslo, pechuga de pollo o pavo, alitas, tortilla de patata Y carne...; después se comen los garbanzos (con repollo) y luego la sopa. Y además de la sopa unas natillas. Me quedé ciega de cocido jajaja.

Para acabar solamente deseo que no se me olviden detalles gordos, y decir "que viva la gastronomía española" jajajaja.

Mañana (viernes) ya os contaré mis aventuras por Lucena, Córdoba. Me lo pasé verdaderamente en grande, pero cómo no, se me ha hecho tarde haciendo las fotos más pequeñas. Sí, un poco desastrosa soy.

Un besazo muy grande. Que descanséis y mañana tengáis un precioso día.