¡Te elijo a ti!
by Un Juntaletras más in
Others
0
1
13 by November by 2017
Por mucho que me duela admitirlo, la franquicia de Pokémon no ha sabido aprovechar las diferentes ediciones animadas que ha tenido. Admitámoslo. En la serie original, y en todas, hay más relleno que trama. Y la propia historia central no suele ser particularmente memorable en ningún caso.
Y, salvando muy pocas, lo mismo ocurre en las películas. Es por todo esto que no tenía mucha esperanza de ver una gran obra con esta nueva entrega de la franquicia.
A pesar de todo, fui al cine a verla. Y, muy a pesar de la película, me emocioné.
Objetivamente, el filme deja mucho que desear. La historia que cuenta es la reescritura del inicio del anime, que se tuerce a partir de cierto punto para acabar contando algo totalmente distinto y jamás visto en la serie. Esto en sí no es malo, simplemente atiende a gustos. El problema está en que quiere aprovecharse de determinadas escenas clásicas para hacer llorar a los espectadores sin que tengan el mismo efecto y sin que encajen limpiamente en la película.
Pongo un ejemplo que se ve venir y que podéis considerar o no spoiler.
En la película solo se ve cómo Ash captura a dos pokémon: Caterpie y Charmander, ambos llegando a su última fase evolutiva.
Todos recordamos el momento en el que Ash libera a Butterfree y todos lo que seguimos la serie en su momento sentimos que una parte de nuestro ser moría en ese instante. ¿Por qué? Porque habíamos visto crecer y evolucionar a ese Butterfree, el primer pokémon de Ash y el segundo que consideró su amigo. Era NUESTRO amigo y Ash lo dejó ir para no impedirle alcanzar la felicidad con su amada.
Esto en la película se resuelve de forma que no te da tiempo a empatizar con él y te da un poco igual.
Por otro lado, y esto sí es más SPOILER, el entrenador que abandona a Charmander no es un capullo más, es un capullo que acaba convirtiéndose en el malo por egoísmo. No es ningún malo. Es un insulto llamarlo villano cuando la propia saga de Pokémon tuvo a un magistral Mewtwo.
Además, cuando evoluciona a Charizard no cambia su personalidad. Se pasa por el forro de los cojones toda la etapa de evolución del personaje que tuvo Charizard hasta que acabó aceptando a Ash como su digno entrenador.
La película tiene momentos muy buenos o que me interesarían para desarrollar en profundidad, como la escena del sueño de Ash. Pero es que luego me hace cosas como el final, esa batalla contra Ho-Oh que plasma de ESA FORMA...
También tiene fallos ridículos de raccord, narrativa, coreografía de los combates... pero da igual. Todo eso da igual. ¿Sabéis por qué? Porque yo, a mis 21 años, salí de la universidad y me fui directo al cine. Y en la cola de la taquilla tuve a mi lado a un padre con su hijo de unos 6 años. Y lo primero que les oí decir fue:
-Entonces, ¿qué peli quieres ver?
-¡La de Pokémon!
Y ya en la sala había gente de mi edad, gente mucho más mayor y más niños pequeños con la cara llena de ilusión.
Me importa una mierda que la película no le llegue a la suela de los zapatos a las grandes obras maestras del séptimo arte. Yo seguiré fiel a Pokémon mientras siga generando esos ambientes y esas combinaciones sociales en las salas de cine. Porque Pokémon se vive a un nivel que solo puede explicar cada uno desde su propia experiencia.
1 COMMENTS